TANDEM EN EL SEDDNA

No se me ocurría una manera mejor de celebrar mi santo que navegando, así que acepté la invitación de la armadora del Seddna, un precioso Elan 33 , para unirme a la travesía que había organizado con más barcos de su club. Iríamos de tripulantes, mi peque y yo y nos daría la oportunidad de conocernos como navegantes y personalmente, antes de enrolarnos juntas para la regata de la Ruta de la Sal. Arribamos al CN de Sta. Pola a las 11h., según lo acordado, y nos pusimos a estibar la compra y luego entre las dos nos dispusimos a poner el Génova que acababa de recibir de la velería. Una en el palo, tirando de la driza y la otra cuidando de la relinga, pero aún así, se enganchó en un pequeño pellizco de la tela. No había manera de subirlo más ni de bajarlo,…..apunto de desistir estábamos, cuando el vecino de amarre salto a nuestra cubierta y de un fuerte estirón consiguió ponerlo en su sitio de nuevo. Evidentemente no era la fuerza nuestra mejor de las virtudes, de ninguna de las dos, tenemo...