SALT QUEENS EN LA RUTA DE LA SAL 2010

Por segundo año consecutivo, participaría en la Ruta de la Sal con una tripulación integramente femenina, aunque ya era el 6º año consecutivo, y contandos las participaciones esporádicas anteriores ya era la décima. Aunque este año era una tripulación completamente nueva a la del año anterior, 6 mujeres que habían tenído como único objetivo durante todo el año prepararse para participar y yo me sentía orgullosa de ello, de haber sido de alguna manera la promotora de esa idea. Además la tripulación era completísima, ibamos dos patronas, una medico, una mecánico, una abogada,.....como para meterse con nosotras!!....jjjjj......

Las primeras que pudimos liberarnos de nuestras amarras terrestres (niños, trabajo, maridos, momios etc) llegamos de avanzadilla para cubrir la logística, estibar la compra e ir poniendo a son de mar a Sofia, un precioso Elan Impression 434. La emoción y los nervios nos mantenían con la aceleración de la ciudad, así que sería necesario hacer una paradita en la terraza chill-out del Zensa, ya en el Portet, para despedir al añorado Lorenzo con unas coronitas, los carros cargados podían esperar aparcados en el pantalán....

Poco a poco fueron incorporándose las demás, ya cuando estábamos en la cena de bienvenida, bajo la carpa del club naútico, empezaron las presentaciones a otros regatistas y a relatar la pequeña historia de nuestra tripulación, como se había formado, quienes eramos, cuánto llevábamos navegando, y por un pequeño momento, en una de esas narrativas, alguien me denominó como "la adoptada", era cierto que se formaron en un barco paralelo al mío el año pasado, pero acaso no fue de alguna manera la demanda de mi plaza libre la que las unió?, desde ese momento tuve un nuevo reto, ser admitida como una más e integrarme con todo lo mejor que lo supiera hacer, no me gustaba sentirme la añadida!.

Canapés, copas, bailes, risas y fotos, fueron agotándonos y obligándonos a retirarnos escalonadamente hasta nuestro querido Sofia que paciente nos esperaba para acunarnos en la dársena.

La mañana amaneció soleada, y parecía que se cumplía la previsión SE 10 a 15 nudos. Ultimas fotos en la bañera de toda la tripulación ya uniformada antes de soltar amarras. Sería mi copatrona la que tendría el honor de sacar a Sofia, para eso tenía el honor este año de patronear, su primer año como patrona y su estreno en una regata de altura la mantenían sobreexcitada. Yo copatronearía con ella, intentando estar a su lado en todo momento pero sin hacerle sombra....intentando imitar a todos los buenos maestros que lo hicieron anteriormente conmigo.

Antes de alcanzar la bocana, vimos lanzada hacia nosotras una de las zodiac de la organización, para avisarnos que entraba el Balearia, que retrocedieramos, así que nos tocó dar un par de vueltas en redondo para dejar pasar a semejante monstruo marino, que como no, dejó patente su poderío con el gran bocinazo que nos arremetió.

El armador salia detrás nuestra con un precioso Benetton 54 para hacernos fotos. La escollera estaba a rebosar de espectadores despidiendo a la flota. Otro barco lleno de niños nos vitoreaban al vernos todo mujeres " a por ellos, a por ellos......", saliamos de los últimos, no queríamos enfrentarnos en la línea de salida, pero había aplazamiento,....izamos mayor y entonces nos dimos cuenta que la zincha del primer patín se había roto. Rápida y audazmente, dos de las tripulantes, corrieron al mástil para hacer un arreglo de fortuna con una goma del pelo!.......que increiblemente aguantó toda la travesía. Fue acabar y en segundos sonar la bocina para empezar la cuenta atrás. Aún nos vimos con el fortuna a nuestro través de Er, que salian como nosotras, dejando al barco del comité por Er.

Según lo previsto, pusimos rumbo al Sur de Formentera a Cabo Berberia, teniamos unos 10 a 12 nudos, y conseguíamos 5 a 6' de velocidad ciñendo y virada a virada, Sofia iba haciendo millas, por detrás nuestro y al través, más cerca de tierra, bastante flota, así que a pesar de todo, no habíamos hecho una mala salida, muchas embarcaciones iban detrás nuestra.

Ya en el fin de semana anterior habíamos distribuido los puestos, dos para La Mayor, dos para el Génova, una de comodín para ayudar en cualquier momento en cualquier puesto, y las dos timoneles. Y ahora empezábamos a poner en práctica lo practicado, y cada virada se bordaba un poco más que la anterior, casi sin tener que dar instrucciones.

También las primeras coronitas y aperitivo empezarían a rolar por la bañera, para empezar a contribuir al desbordante arte culinario que se disfrutó durante toda la travesía a bordo. Primero un guisadito para comer, bien calentito, y luego un cocido para cenar que nos achicharraría la lengua a todas!!.........pero tan buenos y tan calentitos que nos cargaban las pilas a tope en un segundo. Todo se había traido hecho, así que no había que arriesgar ni perder tiempo, cocinando en el barco.

La puesta de sol nos dejó boquiabiertas como siempre, por muchas que veas en el mar, siempre te cautivan y no puedes evitar soñar y dejar que tus sueños viajen con Lorenzo en esa uida que hace por el horizonte.....

Con la noche empezamos a cubrirnos con todas las capas, las que todavía no lo habíamos hecho, y a cambiar nuestras gafas de sol por los frontales. Organizamos las guardias, las haríamos de dos personas cada dos horas, las dos patronas haríamos una rueda aparte de manera que siempre estuviera una despierta y las demás otra.

Durante la primera guardia de 23 a 13h, alcanzamos el Cabo Barberia, mientras un impresionante manto de estrellas nos cubria, Orion fusilánime nos vigilaba por nuestra aleta de Er y Sofia seguía haciendo millas a una media de 6 nudos, el viento seguía establecido de SE con la misma intensidad, nos habíamos librado de la calma chicha en el canal que estaba prevista para la madrugada.....La luna se hizo de rogar, y no empezó a salir hasta que los relojes tocaron la media noche. Roja y prácticamente llena, como la de un agosto cualquiera, que rápidamente alcanzó las alturas apagando con su resplandor el de las modestas estrellas, pero abriéndonos una preciosa estela plateada por nuestra amura de Er....con semejante telón de fondo fue ineludible que fluyeran las típicas conversaciones intimas que acompaña a todas las guardias. Mi compañera en esta guardia estaba radiante, era su primera travesía nocturna, su primera regata de altura, su primera guardia, y era evidente que la emoción la embargara, sus ojos abiertos de par en par para no dejar escapar nada de lo que sucedia, rivalizaban con los mios, que cada vez se resistían más a mantenerse abiertos....cuando volví a salir a la proxima guardia ya estabmos enfilando el faro de Punta Rotja y seguíamos haciendo viradas, el p*** faro nunca llegaba, siempre pasa igual con los faros!!...grrr......y ya en la siguiente con el alba, dejabamos en nuestra popa la punta y se nos antojaba super lejano Tagomago, ahora recíbiamos el viento por nuestra popa, así que solo nos quedaba ir haciendo trasluchadas para ir tomandolo por la aleta y poder competir con los Spi con los que la flota que llevabamos detrás intentaban darnos alcance. Aunque me enorgullece decir que solo uno o dos lo consiguieron, uno de ellos haciendose muy a alta mar donde imagino pilló más viento y otro con un precioso Spi Rosa que nos dió una batida a todos impresionante. Y especialmente nos persiguió un Spi rayado de colores pistacho y granate que muy a su pesar, supongo, no consiguió alcanzarnos!

Nos dieron el paso de control por Tagomago a las 13h del viernes santo y justo fue en ese momento cuando una tremenda calma chicha nos pilló a toda la flota. Rapidamente intentamos trimar suavemente con la pequeña brisa que había de apenas 1 o 2 nudos, poniendo proa a mar a dentro, lejos de la atracción de las piedras de tierra, pero buscando el equilibrio para no hacer demasiadas millas de más.......por nuestra popa veiamos como se desinflaban los Spis al llegar a la influencia de Tagomago en introducirse en la calma. También tuvimos varios que con solo Genova y Mayor intentaban trasluchar como nosotras, pero no lo conseguían, nosotras teníamos un secreto, una trimer de Génova que pacientemente le susurraba a este, sentada a orcajadas a pie de guinche como si montara a caballo y suavemente le amollaba o le cazaba escota animándole para que reaccionara, con una paciencia que todas admiramos mientras dabamos buena cuenta de un aperitivo bajo el sol, anque para no ser tan crueles, no regamos con un buen Jerez que sobradamente tiramos entero por la borda........jajajaja

A penas 25 millas nos quedaban para llegar a la meta, sin embargo llegamos a pensar que pasariamos otra noche en el mar si no levantaba la calma chicha........hasta que vimos un precioso barco con velas de Pentex que intentaba ganar barlovento yendose hacia mar adentro, y ante la alternativa de quedarnos allí flotando con la amenazante tierra cada vez más cerca, optamos por hacer lo mismo, y poco a poco fuimos retirándonos de la costa, hasta ver a toda la flota diminuta......hasta nos dió para celebrar con tarta, velas y cava, nuestro primer aniversario como tripulación, eso sí, el tiempo justo, porque fue dar el último sorbo a nuestros vasos cuando empezó a entrar una brisa que rápidamente se convirtió en un viento de 14 nudos de levante, el role que esperabamos ansiosamente todo el día, que nos permitió volver virada a virada a acercarnos a toda la flota e incluso dejar a bastante de ella atrás. Las últimas millas con la caida del sol y la llegada de la noche fueron de infarto, todos ciñendo a rabiar, barcos por Br y Er, cerrando el ángulo todo lo que podíamos para que no nos dieran alcance por barlovento, obligándoles a comerse nuestro viento sucio por sotavento. Luces rojas por Br que no sabías muy bien si llevaban nuestro mismo bordo o habían virado ya para coger la linea de meta y por tanto nos cruzaban la proa, amurados a Er y con preferencia. Yo me dividia entre el ploter en bañera y el maxsea y la radio en la mesa de cartas, intentando ajustar la dichosa linea de meta, pues el WP que nos habían dado estaba casi en tierra en Cap Negret. Fuera la otra patrona intentaba esquivar los alcances virada a virada, aunque algunas más controladas que otras, por alguna orzada, pero finalmente a las 23:06h nos confirmaron que habíamos cruzado la línea de entrada!...aplausos, besos y rápidamente a la siguiente prueba, encontrar las luces de la bocana de San Antonio con la feria de luces que supone cualquier puerto al arribar......yo lo recordaba del año anterior, sabía que caia a Br, así que me cedieron el timón para encargarme del atraque, que despacito hice marcha atrás para atracar de popa. Un amable marinero nos ayudó con las amarras y nos indicó donde podíamos conseguir una tabla de pasarela pues quedaba muy alto para saltar desde nuestra isla.

Una ducha calentita de premio, una cenita tranqui en el barco con tertulia en la bañera con los vecinos de atraque, unos simpáticos madrileños que habían bajado por el manzanares!!........risas y gin tonics salinizados nos retiraron hasta el camarote para dar ese merecido descanso a nuestros cuerpos, desistiendo de las copitas de bienvenida....

El sábado amaneció entre sol y nubes, aún vimos entrar un barco sobre las 11 de la mañana, pobrecito pensamos, toda la noche ahí fuera otra vez..........fuimos a ver las clasificaciones, al final 61ª en real y 7ª en nuestra categoría (A2), luego de la copita de cava de bienvenida, arranchamos el barco, cociné, como había prometido a la tripu, que no se diga que no sé porque no lo hago casi...jjjj......y comimos con nuestros vecinos del Illuka, compartiendo un poco de todo y sobretodo buena conversación, una vez pasada página a la mala experiencia de las desagradables sesiones radiofónicas que nos obligaron a poner nuestra más energica protesta por escrito al comité.

Por la noche, otra vez uniformadas pero arrraegladas, nos fuimos para la carpa de la entrega de premios, aunque aguantamos poco, el recinto era pequeño y sin ventilación y las malas duchas se hicieron de notar con el olor a humanidad que en pocos momentos se hizo insoportable allí dentro. Así que emprendimos paseo hacia Paradise, la discoteca dónde daban la cena y la fiesta final. Allí dentro ya, acabé de coincidir con los cofrades que todavía no había visto, como Toletum, con quien compartimos un ratito de charla con su tripulación y la nuestra, muy agradable.

El mal rollo sufrido con la radio, nos hizo estar más susceptibles de lo habitual, y cerrarnos en banda, de manera que bailabamos y nos movíamos siempre en grupo, cerrando bandas. Con lo que a mi me gusta relacionarme y compartir experiencias, aventuras y anécdotas de la regata, estuvo un poco raro en general el ambiente. Pero desde luego, no iba a conseguir tan desafortunado incidente aguarnos la noche, así que solas o acompañadas, bailamos hasta el cierre, cuando emprendimos la marcha por el pantalán a pesar de nuestros pies, que chillaban a gritos por haberlos encerrado en botines y zapatos después de tantas horas de naúticos.........

El domingo amaneció lloviendo y con tramontana, así que me volví a echar a dormir, hasta las 12 a.m. casi, que empezó a amanecer la tripu. Casi toda la flota había zarpado ya, pero nosotras no teníamos prisa. Sabiamos que la tramontana habría dejado ola desagradable de estribor y que era mejor esperar al role del Sur que no se produciría hasta el mediodía. Así que entre unas cosas y otras, después de baldear, arranchar todo bien, llenar depositos de agua, etc, soltamos amarras a las 15:00h. Ahora si, mi copatrona al timón sacó tranquilamente al Sofia de su amarre, mientras unos vecinos del pantalán de enfrente nos despedían con altavoz en mano!!............

Habían unos 12 a 14 nudos pero todavía de NE por lo que nos daba de popa total y la ola de través hacía muy difícil mantenernos en la empopada sin trasluchar. Así que después de varias trasluchadas entre isla conejera e islas hormigas, decidimos meter motor un par de horas para salir de allí, hasta que nos entró el role del Sur y ya apagamos y sacamos todo el trapo para amuradas a Br, ir en un través a 7,5 nudos toda la travesía. A las 23 horas estabamos a pie de las Serranas del Montgó, que nos recibieron con 25 nudos, pasadas de trapo, y nos pusieron la adrenalina a tope para poner un rizo que acabó con la arriada definitiva de velas dada la proximidad de la bocana.

Una vez allí, pusimos defensas, bajamos antirociones para tener mejor visibilidad y cedí el timón de nuevo a mi copatrona para que atracara. Sin embargo el cansancio y la falta de práctica con el timón, hizo que se pusiera nerviosa y no consiguiera el gobierno del barco, un momento crítico y el riesgo de irnos contra los pantalanes mal iluminados hizo que me lo volviera a ceder, justo a tiempo para evitar la colisión, y despacito marcha atrás, conseguir atracarlo de popa en el pantalán de Alquilavela del Portet. El marinero asombrado nos recibia para ayudarnos con la guía y las amarras y un poco más tarde el armador, ansioso de conocer nuestra aventura. Aventura que acababa con un sabor agridulce, por unas cosas u otras, habíamos tenido momentos de gloria, momentos de decepción, momentos de alegria, momentos de indignación..........pero al fin y al cabo, no se hace de eso la vida, de momentos??

Espero y deseo que sigamos navegando juntas, como una autentica tripulación que somos ya, dando cada una lo mejor que llevamos dentro, ocupando cada una el lugar que le corresponde y aportando cada una para acabar siendo la mejor tripulación integramente femenina!!

Buenos vientos Salt Queens!!