SINGLADURA OCEANICA : GRAN CANARIAS A MADEIRA


El domingo 13 de octubre, amaneció gris y lloviendo a mares, dia triste para despedirme de Madeira. Como siempre en mis viajes, es tal la desconexión que hago de mi rutina, que tengo la sensación de que salí hace una eternidad, pero si pongo consciencia en ello, tan solo hacia 10 dias que estaba con mis mariposas en el estómago en el aeropuerto de Valencia, intentando no desesperar por el retraso anunciado del vuelo y la impaciencia por llegar a Gran Canaria. Era la última de la tripulación en incorporarse, todos los demás, desconocidos para mi aún, ya habían llegado, arranchado y realizado la compra. Esa era mi primera incógnita, no se había hecho listado, ni anunciado menus, simplemente preguntaron si comíamos de todo. Por si acaso, y como la   competente. Así que dejé la decisión final a cuando se decidiera zarpar. Ya que el parte meteorológico era de F7/8 con mar de fondo de 2 a 3m, resaca del huracán Lorenzo que acababa de pasar por el W. En principio cuando pregunté si se pretendía seguir con los planes de zarpar nada más arribara yo, me contestaron “Negativo”, esta noche veremos meteo otra vez y decidiremos. Aquello me relajó y cuando por fin llegué al pantalán y Javier me aguardaba en la puerta para ayudarme a subir mi HH también, yo sola no habría podido, había que hacerlo por una escalera y por la proa de La Roe. El Acrobat estaba atracado al lado, pero su popa estaba lejos del pantalán, ya que aquí hay mareas. Luego ya me pillaría la maña de cobrar amarras y saltar cuando se acercaba!
La meteorología no apuntaba bien, pedí que comprasen manzanas verdes, barritas energéticas y Redbull!!  Mi segunda incognita era si seria bienvenida mi bolsa de navegar HH, pues es bastante grande e iba a tope de ropa técnica de navegar y saco de dormir, que es muy voluminoso, aunque acaba de percatarme que había olvidado mis botas de agua y el collarin para el vuelo!!. Esto, junto con el parte meteorológico, hacían que no tuviera claro en que velero embarcaría al final. El Acrobat, un SIGMA 38, muy similar a mi querido Libertyenlamar, que pondría rumbo a Madeira y Cadiz, con 6 personas totalmente desconocidas, o con la Roe, un Amel de reciente adquisición, donde inicialmente tenía previsto navegar con su nuevo armador, a quien seguía hacia ya un tiempo por Facebook, pero con quien aún no había podido navegar y me apetecía mucho, cara a poder enrrolarme en algún proyecto futuro juntos. Pero finalmente no le había dado tiempo de prepararlo adecuadamente para una travesía oceánica y solo navegaría con él hasta la Palma, donde finalizaría la regata Stella Oceanic, de la que era socio y organizador con Allende los Mares. Solo serían 24h de navegación y La Palma ya la conocía. Por otra parte, intuía que me prefería en el otro, para reforzar la tripulación...

Aquella noche cenariamos en un barecito de la marina, “Sailor”, antro muy marinero, con su techo lleno de gorras de los navegantes que habían pasado por allí. Era zona de paso de Transmundistas, de hecho habían muchos fondeados al final del muelle. Me encanta verlos, algunso mejores y otros peores, pero todos se caracterizan por las placas solares, heolicos, garrafas y cabos “por si acaso", por doquier. Y no puedo menos que envidiarlos y suspirar por el dia que por fin me encuentre a bordo de uno de ellos, sumergida en esa nueva vida!

Las pizzas y las cervecitas empiezan a rular a go go por las dos mesas que hemos unido, a nuestra tripu se ha unido otro amigo, armador de un precioso Ketch clásico, “Martha”, que además nos invita a salir al dia siguiente a dar unos bordos y 3 tripulantes más de La Roe de ultimísima hora. Un médico y 2 amigas suyas.

Cuando el patrón que liderará el Acrobat me preguntó que yo que haría, no dude en decírselo.
Retrasar la salida hasta por lo menos el domingo, para dejar pasar el F7/8 y darle tiempo al mar a que baje. Además luego viene otra borrasca por el NW que nos obligará a mantenernos en Madeira otro par de días, con lo cual no tiene sentido comernos el marron de un F8, para luego estar esperando en Funchal.

A él le pareció razonable, así que concretamos para zarpar el domingo. Su humildad y prudencia hizo que me decidiera ir a bordo.

El sábado después de salir a dar unos bordos en el precioso Martha, construido como un clásico, sobre planos de uno del siglo pasado, cuidando el detalle y la calidad al máximo, winches y cornamusas de autentico bronce y todo maderas nobles, salimos a entrenar por la tarde con el Acrobat, de forma que fueramos familiarizándonos con la maniobra del barco y conociéndonos unos a otros náuticamente. Ya entonces hubieron amagos de mareos, pues la mar era ya gruesa en cuanto asomabas por la bocana del puerto. Al igual que vimos quien controlaba más o menos.
 Así según lo previsto, el domingo 6 de octubre  a las 9:00 HRB (UT+1), soltamos amarras de los dos veleros del Muelle Deportivo de Las Palmas de Gran Canaria (latitud 33º2,52’N Longitud 12º54,76’W) La Roe rumbo a la Palma, unas 130 millas por delante, 1 día más o menos de navegación y nosotros cerca de 300 hasta Funchal, Madeira.

El dia anterior tras el entrenamiento ya dejamos un rizo puesto, pero hoy al izar la Mayor ya pusimos el segundo, dado el mar y el viento previsto y que en este barco hay que ir al palo a poner el oyao en el gratil y poner matafiones para sujetar el pujamen de la vela. Así que la maniobra de izar velas nos llevo media hora. Eran las 9:35 HRB cuando dejamos la boya verde por Br y pusimos rumbo 60º hacia el mar, ciñendo a muerte, para retirarnos lo suficiente y luego dar un único bordo para esquivar la Isleta Vigia y todos sus bajos.

El viento, según lo previsto, de 20 a 25 nudos, rachas de F7, mar de 2 a 3 m de fondo. Hay que
timoneal a mano para gastar menos baterías y negociar mejor las olas. Inicialmente nos encargamos Javier, un bombero de Cádiz armador de un curioso 22 pies, Jose, el patrón, experto navegante de vela ligera y armador tambien de un veintitantos pies, y el único que había navegado antes en el Acrobat entre islas y yo. Mas tarde, también lo haría Julieta, que para llevar solo 6 meses navegando no lo hace nada mal. De hecho acabaría ganándose el titulo de “lobezna de mar” por aquello de su juventud….jajaja. La tercera femina de la tripulación, volcó rápido, al bajar al baño se mareó y ya no podría salir de su camarote durante toda la travesía, su pareja, armador de 2 veleros en Puerto Santa Maria, un veinteintantos tambien y un 40 pies de ferrocemento que están arreglando para vivir en el, no quiso de momento coger el timón.

Las olas son importantes, porque además de la grande del mar de fondo, viene otra corta y cruzada producida por el efecto fetch del viento, por lo que cada hora más o menos cambiamos. Son las 10:35 HRB cuando oímos el primer PAN PAN, pasamos a canal 26 VHF, son 3 mensajes de urgencia, el primero por 2 embarcaciones con 40 personas a bordo que zarpó de Mauritania rumbo a Canarias, el segundo mensaje da una posiciñon de una embarcación a la deriva con 19 personas a bordo y el 3º otra embarcación a la deriva con 32 personas a bordo que zarpó de Cabo Blanco. Asistan si fuera necesario y reporten si avistan. Cruzo los dedos porque no nos los encontremos, puede ser un marrón impresionante. No puedes acercarte por peligro de abordaje, pero tampoco puedes irte hasta que lleguen las autoridades, bueno finalmente no vimos ninguna.

Cada hora mas o menos, me encargo de bajar y tomar nota de posición, latitud, longitud, rumbo, velocidad y viento, según escala de Boufort y mar según la de Douglas. Es una buena costumbre que procuro mantener por si en algún momento necesitáramos tirar de la navegación de estima y en todo caso para documentar el libro de Bitácoras del armador. Paralelamente le doy al SPOT, un dispositivio que se ha comprado para lanzar nuestra posición vía satélite y desde el Facebook de Sailing Living Club y Lab puedan seguirnos.

A las 12HRB por fin viramos y ponemos rumbo 320º ya a Funchal, vamos a 7 nudos de velocidad casi constantes, desde que salimos, el viento no ha bajado de 18 nudos de NE fiel a lo previsto, parece que quiere bajar algo el mar y el sol intenta salir timidamente. Al principio vimos por nuestra popa a la Roe, pero ellos viraron mucho antes que nosotros, navegando cerca de la costa todo el tiempo. Diego conoce bien la zona y sus bajos, pensé.

Con el nuevo rumbo vamos amurados a Er y corremos algo más, el patrón piensa que tenemos casi un nudo de corriente a favor, que es lo que difiere la velocidad de corredera de la del GPS.

Vamos ciñendo a rabiar, todos con su chalecos y enganchados a las líneas de vida, es algo muy importante, la seguridad de cada uno es la de todos, no están las condiciones para sufrir un MOB, así que no perdono que se lo salte nadie, ni el patrón.

Poco a poco las condiciones van haciendo estragos en los estómagos de la tripulación, todos han vomitado ya, hasta Paco, que parecía el más chulo, ha acabado volcando, asi que aviso al patrón que seguramente los turnos de guardia se reducirán a él y a mi, por lo que le digo que voy a bajar a intentar dormir un rato, pues la noche anterior, no se muy bien por qué, me desvele y no pegué ojo!

Pero que va, imposible, estoy pendiente de todos los movimientos y ruidos del barco y no lo consigo, pero por lo menos me he puesto un par de meditaciones que me descargué y me han relajado.

Cuando salgo ha subido más el viento y seguimos teniendo mar gruesa, están barajando poner el tercer rizo a la Mayor y me piden opinión, asi que les digo lo que pienso, que la segunda vez que se piensa poner un rizo ya es tarde, asi que nos ponemos a ello, además cara a la noche, mejor ser conservadores aunque perdamos algo de velocidad. Lo más peligroso es que de nuevo uno tiene que ir al palo a enganchar el oyao y luego poner entre todos los matafiones por el pujamen. Como no, enviamos a nuestro tripulante bombero!

La gente no ha comido, es imposible cocinar con esta escora y tantos pantocazos, las manzanas empiezan a hacer su papel, Paco le echó coraje y preparó unos sadwiches de fiambre para todos, que le costaron también su vomitón. Luego en la noche también las barritas de chocolate y las galletas.

A las 19h recogemos algo más de Génova, es de Keblar y está muy castigada, me preocupa que raje por el pujamen, asi que de vez en cuando la alumbro con el frontal.

Empezamos a ponernos ropa de abrigo y yo cambio mi chaqueta ligera de dia por la de mi traje de agua más potente, previo polar debajo. De noche pondremos el piloto automático aunque tengamos que arrancar más veces el motor para cargar batería, las vamos vigilando para que no bajen de 12,3. El dia estuvo nublado y las placas solares no creo que hicieran mucho. La noche también es con nubes, así que la menuda luna creciente no nos ilumina a penas.

Con la nocturnidad y la guardia en solitario con el patrón, llegan las conversaciones intimas donde cada uno nos contamos nuestros CV, nuestra trayectoria hasta el momento y nuestros proyectos futuros. Me encantan estos momentos en toda navegación, donde se caen las pocas máscaras que quedan, pues el mar te las arranca normalmente de cuajo en cuanto embarcas, y vamos todos con el alma al descubierto. Son momentos de paz, de reflexión, de compartir con un compañero de guardia que en ese momento lo es todo para ti….

Sobre las 02 a.m.  baja el patrón a descansar un rato y me quedo yo con Javier un rato, que ha subido a pesar de no encontrarse tampoco muy bien. Empezamos a ver contaminación lumínica por la amura de Er, bajo a ver el AIS pero no aparece nada, asi que pienso que es un faro de las islas Salvajes, que aunque son diminutas, algo tendrán de señalización, y además era la hora que teníamos previsto más o menos dejarlas por nuestro Er, sin embargo cuando se levanta el patrón a las 4:30 HRB y mira el AIS ve que es un barco de cruceros, el Celebrity, y viene con rumbo de colisión!. Nos pide que metamos rápidamente -10º grados al piloto a Br. Otro mercante nos ha cruzado por la aleta de Br, pero ese ya lo tenia controlado Javier.

El dia siguiente amanece igual, la previsión no se cumple, a estas alturas ya tendría que haber bajado viento y mar. Por lo menos sale el sol, que siempre pinta las cosas de otra manera. Pero los cuerpos siguen revueltos, imposible cocinar, solo yo hago hoy el ángelus, todos me envidian por tener cuerpo para cervecita y papas fritas. Son millas acumuladas supongo. A mediodía les saco los huevos cocidos y la ensalada de pasta, tienen que intentar comer, aunque casi todos tal cual ingieren lo tiran. Lo peor es bajar al baño, sobretodo las chicas que no tenemos más remedio, pues solo el tiempo que tardes en desvestirte de tantas capas, te has consumido el limite de estar abajo sin marearte y cuando vuelves ya estás colocado total!

Lo cierto es que el movimiento es bestial, todo por dentro está desastrado, la basura volcó varias veces por lo que el suelo resbala, hay que tener sumo cuidado con no lastimarse con los golpes!

El dia pasa rápido, aunque no me dejan poner música, no les gusta navegar con ella, prefieren oir el mar y el viento, pues os vais a inchar les digo!

La única radio que oímos es la oficial,canal 16 de la VHF, donde oímos los partes meteorológicos y aún nos llega otro PAN PAN de un hombre al agua en el Norte de Tenerife, el sábado 5 a las 23h, está muerto seguro, pienso.

La segunda noche todos intentan aguantar como pueden y cumplir sus guardias, cada uno en su justa
medida. A estas alturas, según la previsión, ya debería de haber bajado el viento y el mar, pero nada, y mira que se lo pido a mi angel de la guarda, más que nada para que todos los cuerpos se estabilicen un poco. Uno de ellos me pregunta, y si sigue subiendo que haríamos? Rezar! Le contesto sonriendo, para quitar hierro a la cosa….lo cierto es que espero sinceramente que no ocurra, ya llevamos casi todo el Génova recogido, y no nos quedan rizos en la Mayor, así que lo tendríamos jodidillo . Hay que estar muy atento que todo esté trabajando bien, y no hay ningún contratiempo por torpezas. Por ejemplo esta tarde me di cuenta, al agarrarme para no volcar, que la contraescota del Génova se había soltado del puño. Como ha podido deshacerse un as de guía y además de la que no trabaja? Bueno, pues el caso es que ha ocurrido, y de nuevo le toca a Javier ir enganchado a hacerlo de nuevo.

Luego durante su guardia con el patrón, le dieron al pasar al interruptor del piloto y han trasluchado, dándole la botavara en la nariz y haciendole sangrar un poco. Estas son las cosas que pueden generarnos problemas paralelos a la navegación, porque el cansancio va pasando revista.

Por lo menos la segunda noche está despejado y cuando salgo a las 4:30h el universo entero está sobre nosotros, como si del planetarium se tratara. Distingo la nebulosa de la via láctea, Orion, Casiopea, la Osa Mayor, las Pleyades, la Polar, Geminis…. Y le digo a Javier que me acompaña y Paco que sube poco después, que hoy intentaremos bajar la Polar en el crespúsuclo, pues ya el viento ha empezado por fin a bajar, de hecho en la guardia anterior tuvieron que recoger ya Genova y arrancar un rato el motor. Ahora en la mia ha subido otra vez, pero suponemos que es el rebufo que nos llega por ambos laterales de la isla, pues ya estamos a sotavento de Madeira.

La trasluchada nos vino bien y ya rectificaron rumbo al 42º. Nos quedan 34 millas, ya se ven perfectamente todas las luces de tierra, debe tener mucha altura porque realmente aun son muchas millas. Antes de la salida del sol, a las 8:00HRB, veo caer una estrella fugaz y aprovecho para lanzar mi deseo que llevo preparado toda la travesía!

Nos quedan 23 millas, el patrón nos platea si hacemos bordos o arrancamos motor para las 3 o 4h que nos quedan. Por supuesto optamos por lo segundo, estamos todos muy cansados. Además el viento ha bajado bastante, la mar está tendida. Ha salido un estupendo sol. Vamos despojándonos de nuestros trajes de agua. Incluso hay quien se atreve a tirarse unos cubazos de agua de mar y lucir paso pose con botas de agua y camisa de cuadros!! Jajajaja Nosotras nos vamos también a proa ha hacernos fotos con la isla de fondo.

Estamos cansados pero satisfechos, lo hemos logrado, unos con más esfuerzo que otros, pero todos
colaborando y dando lo mejor que llevas dentro.

Finalmente arribamos a las 13:30 HRB a la Marina do Funchal (l: 32º 38,81’N L:16º54,66’W) no nos
contestan por radio y finalmente lo consigue Javier por el móvil. El marinero nos aguarda nada mas rebasar el faro, entras como en una bocana a Br es donde están los grandes cruceros y luego cayendo a Er está la marina deportiva. A pesar de estar una semana llamando para reservar, nos acoplan en el muelle de espera. Por el través de Er. El marinero nos dice que dejemos largas las amarras porque la marea es de 2 metros y efectivamente, ahora está alta, pero cuando salimos por la tarde estamos abajo del todo y tenemos que trepar por unas escaleras de cabo y tablas que tienen al efecto.
La pared, e incluso partes del suelo del pantalán, están llenos de pintadas de los veleros que han zarpado desde allí para cruzar el Atlántico, me recuerda a la que nosotros dejamos en mi cruce con el Rebeca en el 2009, pero nosotros lo pintamos en Tenerife.

El patrón va a hacer los papeles, yo me pongo a limpiar y arranchar junto con Julieta, hasta que ella también tiene que marchar para aclarar sus documentación y me quedo sola. Emilia ha salido por fin del camarote y Paco la ha acompañado a tomarse algo. Cuando termino de limpiar la cocina, nevera, baño y suelo del living, vamos a tomar algo a la primera terraza que vemos. Los cuerpos ya empezan a pedir comida, es buenísima señal!

La previsión sigue como vimos, entra el miércoles una borrasca por NW que nos obliga a mantenernos refugiados aquí. Ese dia llega Alba, la última tripulante que faltaba. Yo decido desembarcarme, ya que las casi 600 millas que faltan a Cadiz es imposible hacerlas y llegar el lunes a la oficina. Emilia y Paco al final también, por la salud de ella. Asi que el miércoles lo dedicamos a buscarnos vuelos y alojamiento para cuando zarpen ellos, inicialmente viernes, aunque al final ven una ventana y lo adelantan al jueves tarde.

El jueves los que nos quedamos de terrícolas nos vamos de turisteo por la isla, mientras ellos están arranchando, comprando de nuevo vivieres y preparándolo todo para la nueva etapa.

Visitamos Cámara do Lobo, un pueblecito pesquero que tiene un lindo puerto natural y Cabo Girao, con su mirador de cristal en el acantilado a mas de 580m sobre el nivel del mar. La isla es totalmente volcanica, sus piedras negras la delatan. Por ello tiene mucha altitud, su pico mayor es de más de 2000 m sobre el nivel del mar. Es toda muy verde, en las partes bajas hay mucho cultivo sobre todo de vino y en las partes altas los típicos bosques de coniferas de altas montañas. De hecho uno de los atractivos turísticos de la isla son las carreras de runing y bici de montaña.

Al dia siguiente fuimos a Sao Vicente, pero un contratiempo con el autobús hizo que llegaramos ya
demasiado tarde para visitar la gruta que hay allí, solo pudimos comer y ver la playa, aunque luego un lugareño me dijo que no nos perdimos nada.

Y el último dia ya me fui solateras a Santana, pueblo del norte con las casas típicas, tipo barracas. Alli también visite un parque temático y un funicular sobre el acantilado.

Dias de turismo y relax en el solariego hotel Montecarlo, que fue refugio de niños, mujeres y ancianos de Gibraltar durante la segunda Guerra Mundial y que desde su terraza tenia una panorámica maravillosa de toda la ciudad y el puerto.

La cancelación de mi vuelo y mas de 24h de espera y deambulación entre aeropuertos, no consiguó que borrara la bonita experiencia que me llevaba de todo lo vivido y visto en Madeira.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
...buen relato!! ... alma de escritora?

Entradas populares de este blog

POR FIN EL CANAL DE PANAMÁ

VOLVIENDO A LAS PITIUSAS CON AMIG@S

CARIBE CON EL MAVERIK